Este presentación es la primera de una serie de Salmos que estaremos publicando mensualmente. Esperando que la Palabra de Dios que compartimos sea de bendición y llegue a ti en el mejor momento de tu vida; cuando verdaderamente tengas la necesidad y sea Dios el que te fortalezca y refresque tu alma.
¿Sabes tú porqué el salmista se compara con un ciervo? Es impresionante como la palabra de Dios usa los ejemplos de los animales para instruirnos en sabiduría y conocimiento,y basta con que nos tomemos el tiempo para estudiar un poco sobre ellos, y nos maravillamos al encontrar la enseñanza que el Señor nos ha querido dar con el comportamiento de estos, como el ciervo brama por las corrientes de las aguas, dice el salmista, "así clama por ti oh Dios, el alma mía". Es impresionante conocer que estos animales braman por agua, por dos razones, la sed, y el olor del sudor que los delata ante sus enemigos.
El ciervo es un animal astuto y ágil, esa agilidad se pone de manifiesto cuando es perseguido por sus depredadores. Se cansa muy rápido. En las montañas y en su hábitat tiene que convivir con sus peores enemigos, leones hambrientos, tigres, entre otros. Cuando llega el verano, el ciervo tendrá que enfrentarse con su peor enemigo, su sudor (las feromonas que despiden su sudor lo delata ante sus depredadores), por lo tanto el tiene que tratar de encontrar un río donde bañarse.
De esa misma forma que el anhela esa agua, nosotros debemos anhelar el agua de Dios; ir a la fuente inagotable.
Jesús dijo en Juan. 4:14 "mas el que bebiere del agua que yo le daré, no tendrá sed jamás; sino que el agua que yo le daré será en él una fuente de agua que salte para vida eterna".
Él es la fuente que quita la sed, que sacia al cansado, al fatigado…Jesús es el agua viva. Así que recurre siempre a Él. Él saciará tu sed.
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